En esta ruta podremos visitar los vestigios arqueológicos hallados y conservados en Monturque pertenecientes a distintas dominaciones de la Edad Antigua.
El punto de partida lo constituye el Museo Histórico Local, situado en el Paseo de San Mateo. Es una amplia sala de exposición donde se pueden contemplar hallazgos pertenecientes a la Prehistoria, a la Cultura Ibérica, a la Cultura Romana, al dominio Musulmán y otros restos pertenecientes a la Época Medieval.
Son hallazgos extraídos de excavaciones llevadas a cabo en el término municipal de Monturque, pero también son hallazgos fortuitos dados en las labores agrícolas, en reformas o construcciones de casas privadas. Se trata de un Museo pequeño, pero de gran contenido didáctico, que atesora algunas piezas de gran importancia y otras singulares.
Junto al Museo, bajo el antiguo Cementerio se ubican las Cisternas Romanas, una gran obra hidráulica, que data del I siglo d.C., cuya finalidad era recaudar y almacenar agua de lluvia para poder abastecer al pueblo. Tenían una capacidad de 850.000 l. y son las únicas que se conservan íntegramente en España, habiendo siendo elegidas recientemente como una de las 7 maravillas de la provincia de Córdoba.
Son 3 naves paralelas, dispuestas de Norte a Sur, divididas cada una de ellas en 4 compartimentos, comunicados entre sí por puertas y orificios para evitar el rebose del agua. En la nave más situada al Este y en el extremo Norte de la misma, parte una prolongación de 30 m. que desemboca en un pozo y que constituye el desagüe de la Cisterna. La visita a este monumento ha mejorado considerablemente en los últimos años gracias a la musealización de su interior.
Al salir de las Cisternas nos dirigiremos al Criptopórtico Romano situado en el cercano mirador de Los Paseíllos, adarve natural que rodea la parte alta de la población por sus lados Este y Norte, detrás de la Parroquia de San Mateo y del Cementerio.
Se trata de una galería semi-subterránea, que servía como almacén de víveres (aceite, vino o grano) y contribuía a salvaguardar el desnivel natural del terreno. Parece ser que encima de esa galería, se situaba el mercado principal del pueblo. Al valor arqueológico se suma la contemplación paisajística, con interesantes vistas sobre la Campiña y las cercanas Sierras Subbéticas.
Para terminar la visita al Patrimonio arqueológico de Monturque sólo nos falta bajar la C/ Rafael de Lara y visitar el Castillo Medieval. Se trata de una fortaleza defensiva, signo de identidad del pueblo de Monturque. Lo forma un recinto de planta rectangular, del que se conservan 2 torres y los restos de la muralla que las unía y protegía el recinto.
La Torre del Homenaje se levanta en el centro del Patio de Armas, con dos plantas, escaleras talladas en el grueso muro y una terraza desde la que se divisa una impresionante panorámica. La otra torre se sitúa en el vértice sur de la muralla, es de planta pentagonal y de ella destacan las 3 troneras con salida al exterior que aún se conservan. En el interior del recinto del castillo también se conservan algunos restos de época romana, entre los que destaca una cisterna de tipo «bagnarola».